Han pasado más de dos meses y unos 77 días desde la última vez que posteé en el blog. Hace algunas semanas que quería volver, pero la falta de tiempo en estos meses han coincidido desgraciadamente con una sobrecarga de trabajo, la producción de un nuevo programa de televisión y la mayor parte del resto del tiempo, me la he pasado con la pequeña Nina. Sin tiempo de entrar al blog. Hace varios meses que no puedo leer un libro. Hace varios meses que no vamos al cine. Hace varios meses que no salimos de noche. Digamos que hace varios meses nuestra vida social desapareció. Nina se duerme entre las nueve y las doce que es la hora que normalmente pasó con ella de lunes a viernes cuando regreso del trabajo. Definitivamente, un tiempo demasiado intenso. Momentos para disfrutar y fluir a través de la “paternidad”. Creo que soy un padre “chocho”, babeo y babeo por ella y la disfruto. Me vuelve loco.
Hace varias semanas que tenía muchas ganas de encontrar un tiempito para sentarme a escribir y volver. No sabía de qué, hay tantas cosas al mismo tiempo en juego. Tampoco sabía si cambiar hasta el nombre del blog. Pero bueno, simplemente quería volver, volver a darme este tiempo.
Mientras tanto, ella acaba de cumplir cuatro meses.
No hay comentarios:
Publicar un comentario