Esta vuelta también coincide con lo que podría llamarse “Aniversario de concepción de Nina”.
Fue hace aproximadamente un año, por estos días un espermatozoide acaba de llegar al ovulo y se iniciaba la multiplicación celular, el cigoto, el embrión y Nina.
Es probable que haya sido en un lugar fuera de Lima, quizá en Lunahuana, en el Refugio de Santiago y a donde viajamos a pasar las fiestas patrias. Pudo haber sido también durante el mensaje de Alan García.
Después, los primeros días de agosto viaje solo a Pucallpa. Unas breves vacaciones, ganas de estar solo y un breve “retiro espiritual”. Un breve viaje sin rumbo, quería ir a la selva y entre otras cosas me la pase leyendo un libro de Hanif Kureishi que se llama “Mi oído en su corazón”, una especie de autobiografía a través del vínculo que el escritor tuvo con su padre: “una cosa que sí ves, aunque lleva toda una vida entenderla, es que el ser humano –tus padres y también tú – es imposible de conocer a fondo. Después de todo esto, el sentimiento que tengo respecto a mi padre es el que puedes tener sólo después de conocer a alguien mucho tiempo: el de que en realidad no le conoces en absoluto.”
Aquellos días el tema de la paternidad me tocaba de menaras diversas. Finalmente seguía sin saber quién fue mi padre, el hombre del que solo conservo unas cuantas fotos.
En aquel viaje no sabía que mi chica estaba embarazada, que iba a ser padre y que durante esos días las células comenzaban a multiplicarse. Nos enteramos recién, a los pocos días de haber regresado, un diez de agosto, un día como hoy…
2 comentarios:
durante el discurso de alan no! eso no! nina - alan.... no!
Que dicha que volviste a escribir!! Me entretiene mucho lo que escribes y tienen una nena preciosa!!!!!!
Si, nuestra visa social!!! Yo recuerdo haberla tenido alguna vez!!
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