viernes, 18 de abril de 2008

Impresiones: Primeros trece días



1
En estos primeros días el tema de preocupación ha sido la evolución del peso de la pequeña Nina. Su peso todavía esta por debajo del peso normal que debería tener para los días que tiene. Nació con 2.850 kilos y bajo hasta 2.540 y ahora en el día trece tiene 2.700, según las últimas mediciones del pediatra, esta subiendo a un promedio de 30 gramos por día. Este es el tipo de tema que para unos padres primerizos como nosotros resulta inevitable cierta preocupación. La cantidad de leche que lacta parece no es suficiente y hemos tenido finalmente que combinar con formula. Además tiene un ritmo muy particular de succión, es de las que se queda dormida con la teta en la boca y hay que estar despertándola. También hemos escuchado que el tema de las complicaciones con la lactancia es un caso frecuente en cesáreas. El acto mismo del parto natural es un estímulo tanto en la madre como en el bebé. Por ejemplo, el parto natural desencadena la oxitocina, una hormona que estimula la salida de leche.
El tema de la lactancia puede resultar un tema complejo física y emocionalmente.


2
Mitos y verdades sobre el chanchito. Se habla tanto del chanchito, que ponte al bebé sobre el hombro para sacar su chanchito, que no te olvides, siempre alguien opina sobre el chanchito. El pediatra nos dice que el chanchito solo se da básicamente con la leche de formula, no hay que estar sacando chanchito con la leche materna.
Es absolutamente cierto de que todos tienen algo que opinar. Uff!!!! Un bombardeo. Evidentemente con las mejores intenciones, a veces las opiniones pueden ser hasta contradictorias. Hay que aprender a reconocer las buenas sugerencias.


3
Las visitas. En algunos momentos han llegado a estar dentro de la habitación de la casa como nueve personas al mismo tiempo. Hay que aprender administrar el tráfico de visitas.

4
Que importante ha resultado el apoyo de la familia más cercana en estos días de ajetreos, especialmente mi suegra Charo y mi cuñada Lucía. Estoy muy agradecido.

5
Aprendiendo a cambiar los pañales. Por el momento lo vamos haciendo juntos. Hubo una madrugada en plena cambiadora y cuando ya estaba casi limpiecita que de pronto nos sorprendió y comenzó a orinar mojando parte de su ropa. Somos unos aprendices totales. Vamos aprendiendo que en ocasiones, en plena cambiada, la pequeña remata con un poco de pichi o un bonus de caquita. Voy aprendiendo a cambiarla, a pasar los algodones y las gacitas. Todo es más fácil cuando no llora, en cambio en pleno llanto que difícil resulta ponerle un pantaloncito, por Dios, que cantidad de brochecitos que puede tener la ropa de bebé.




6
Para las escaldaduras, Hipoglós, un nombre que se une a la nueva lista de nombres. Descubrimos incluso una crema mejor que se llama Weleda, una crema pañal de caléndula. Por otro lado, hay momentos de la madrugada en que las energías ya no dan más y da flojera tener que levantarse a cambiar los pañales. Hay un gran cambio generacional con el tema de los pañales, siempre las mamás de cierta edad hablan de los grandes beneficios del pañal desechable y los famosos pañales de antes que había que hervir. Sin duda, gran paso histórico. Sin embargo creo que falta todavía un paso más en el desarrollo de la tecnología de pañales. Un pañal que pueda quedarse al menos unas ocho a doce horas sin necesidad de ser cambiado, algo así como un pañal que se limpie así mismo por algún tipo de proceso químico que absorva y regeneré la pichi y la caca.


7
Es absolutamente cierto eso que escuchaba durante el embarazo: “Aprovechen en dormir, duerman!” Las madrugadas discurren entre una y otra despertada - hubo una noche que fueron unas seis- nuevamente con el llanto de la bebé, tener que pararse de la cama automáticamente, el cambio de pañales o en la cocina a las tres y media de la madrugada esterilizando un biberón y volver por fin a la cama a intentar dormir al menos un par de horas seguiditas. Unos segundos de breve y desgarradora nostalgia por aquellas noches que no volverán a ser las mismas. Siempre fui un dormilón, de los que cierran los ojos y en menos de un minuto ya están profundamente dormidos y no despiertan hasta el día siguiente a ritmo de varias sonadas de despertador, que suena cada diez minutos durante dos horas. Todo eso ha terminado, probablemente por muchos años. Cuándo tendré una nochecita para dormir de largo.
Pero quien si duerme bastante es ella. En principio, estos primeros días cuatro horas de vigilia en total durante el día. Todo el resto del tiempo es solo dormir.





8
Esterilizar los biberones en agua hirviendo. Que manera de hervir agua! Las medidas de salubridad. Nunca me he lavado en mi vida tantas veces las manos!

9
Ya saqué también la partida de nacimiento de la pequeña. En más de un momento estuve tentado de llamarla Nina Estrella. Pero finalmente, desistí y optamos por un nombre simple y puro: Nina.
Aunque para mi, entre nos, entre tú y yo, eres mi Nina Estrella.

10
A quién se parece. Desde los primeros días los comentarios que inspeccionan la fisonomía de la pequeña para identificar los parecidos tanto con el padre como con la madre, que si el tamaño de los ojos son de la madre, que si los labios del padre, que si de la mitad de la cara hacia arriba más se parece a la madre o si la forma de la cabeza se parece es del padre. Incluso, la cosa puede ir más allá: las orejas parecen del bisabuelo, es decir, tendría orejas grandes. Algunos hablan de una mezcla. Otros dicen que se parece más a mi, incluso me llaman Nino.
Aunque También dicen que los bebes en pocos meses cambian un montón.

11
Hace más de un año que deje de ir a terapia. Me pregunto de qué hablaría si todavía fuera. Por dónde va mi mente estos días. Las asociaciones que pasan por mi cabeza. Recuerdos. Fantasías. Miedos. Cuestionamientos. Deseos
Se tratan de días demasiado intensos, muchas cosas se remueven dentro de mi.

12
3.50 de la madrugada y una nueva despertada.
Nina termina de lactar y pasa a la cama junto a mi lado. Se queda despierta con los ojos súper abiertos. De alguna manera nuestras miradas se encuentran para establecerse algún tipo de contacto. Paso a su lado los mejores diez minutos de la madrugada.
Pese a que un amigo diga que esa fascinación es tan solo inicial, como todo lo nuevo, pasan algunas semanas y la bebita seguirá llorando. Por el momento, son suficientes esos pequeños encuentros con ella. Vivo y me permito disfrutar de mi condición de papá chocho, de esos que incluso anda tomando fotos de su hija y las puede mostrar a los amigos que vienen.

13
Las dos semanas de vacaciones llegan a su fin.
El lunes de vuelta al trabajo y me hubiera gustado que estas vacaciones se prolongasen por todo un mes. Inicialmente dos días de para por paternidad en mi trabajo que los sume a días pendientes de vacaciones del año pasado. Me gustaría vivir en Suecia en donde al parecer te dan nada más y nada menos que seis meses de para por paternidad. En estos días finalmente no he tenido ningún problema en dormir por partes y levantarme todas las veces que era necesario, al día siguiente no había que ir al trabajo. Todavía no conseguimos alguna chica que nos apoye durante algunas horas. Han sido dos semanas de duras tareas, por momentos sintiendo que hace buen tiempo no trabajaba tanto. Con algo de vergüenza diré que inclusive tres días no tuve tiempo ni de bañarme. El ritmo lo ha marcado la pequeña Nina que duerme un promedio de dos a tres horas y en donde hay que aprovecha en hacer todo lo que esta pendiente en ese lapso de tiempo. Vamos a ver qué pasa.

lunes, 7 de abril de 2008

viernes, 4 de abril de 2008

últimas horas



miércoles 02 abril
10.05pm. Regreso a casa de trabajar. Mi chica me cuenta que a eso de la siete de la noche experimento sus primeras contracciones mucho más fuertes. Es normal. Me enseña los maletines llevaremos a la clínica. La cesárea será en cuatro días, el domingo.


Jueves 03 de abril
8.20am. Nos bañamos juntos, vamos a extrañar la pancita. Mi chica disfruta escuchando comentarios sobre su pancita. Ella también la va a extrañar.

10.30am. Nueva ecografía. Al parecer la placenta ha subido un poco. Salimos con dudas que tendremos que resolver mañana con la ginecóloga. Si la placenta sube más ya no sería necesaria una cesárea.

6.30pm Comienzo a tomar Norflex y Celebrex. Hace tres semanas ando con un dolor en la zona del hombro, una mezcla de mala postura y probablemente tensión. En los últimos días algunas erupciones en la piel por estrés. Estoy comiendo bastante, antojos de última hora.

7.30pm Acompaño a mi chica a una cesión de pre natal en donde pasan un video sobre la cesárea. Se ve todo, como abren la piel y sacan al bebito.
No cierro los ojos, miro atentamente.





Viernes 04

11.00 En la clínica, cita con la ginecóloga. Me como un sánguche de pollo y un pionono.

11.37
Hacemos una ecografía final. Sus latidos y sus movimientos están bien. Tres kilos para 36 semanas. Veo a la pequeñita a través de la pantalla pero ya quiero tenerla junto a mi, muchísimas ganas de verla y tenerla en mis brazos. Confirmado, la cesárea será este domingo.

8.20pm.
Terminando de trabajar dejando todo listo, tomaré dos semanas de vacaciones. Quiero estar con mi hija. imagino cómo será nuestro primer encuentro, cuando nos veamos por primera vez.
Qué tipo de conexión se dará.


9.00 pm
De regreso a casa. Durante la tarde han seguido las contracciones de corta duración, duran entre tres a cinco segundos y en intervalos irregulares que van de cinco minutos o dos horas. Una manchita, un chorrito, un poco de líquido, una pequeña alarma. Hablamos con la ginecóloga. Podría ser el inicio de una ruptura de fuente. Le ha mandado reposo para evitar cualquier complicación. Estamos midiendo cada cuanto tiempo van las contracciones.

Ha venido una pareja de amigos donde ella esta también embarazada. Comimos chifa y brindamos. En una semana ya la pequeña estará en casa con nosotros.

Cómo será mañana sábado. Me gustaría un día relativamente tranquilo.



Sábado 05.

8am. Salgo a montar un poco de bicicleta al malecón. Termino sentado en una banca del malecón con una mañana llena de sol que va despertando. Mi pensamientos divagan.
El dolor del hombro continua voy a seguir con el celebrex.

9.30. Labores domésticas como lavar platos, darles de comer a las gatas, cambiarles su arena, regar las plantas.
Mi chica tiene que guardar reposo. Anoche soñé con la pequeña Nina, como si tuviera tres años. También tuve una pesadilla, iba al banco y quedaba muy poca plata en mi cuenta y recién estaba a inicios del mes. Vendran varias tareas matutinas, últimos encargos para dejar las cosas listas.

11.07 am Mañana a esta misma hora ya estaremos en la clínica, la operación esta programada para las once.
Estamos a 24 horas.



7pm
Día de pequeños trajines: banco, algunos pagos y algunas compras en el supermercado. Mi chica a estado reposando durante la mañana pero ya a media tarde con algunos suaves acomodos. Ya esta listo el moisés en nuestro cuarto donde va a dormir la pequeña los primeros meses. Todo va quedando listo. Mi madre viene trayendo algunos regalitos para su primera nieta. Comienzo acomodar las cosas que llevaré a la clínica, yo también me voy a internar por tres días.
Mañana a estas horas ya estará cumpliendo sus primeras horas de nacida.
He comprado también una botella de vino para acompañar esta noche.

10.55pm
Mañana estaremos en la clínica a las nueve de la mañana.
Yo con la emoción de que mañana veré a la bebe. Mi chica con un poco de angustia por la cesárea, será su primera operación.


martes, 1 de abril de 2008

El sueño de la maternidad



Cada vez que veo a mi chica preparando y alistando la ropa de la bebita pienso en ella de niña, cuando probablemente jugaba con muñecas y al mismo tiempo comenzaba ya su “preparación” para ser madre. La maternidad es de alguna manera volver a jugar a las muñecas, pero esta vez, la muñeca es de verdad. Me percato que por lo general, las mujeres en mayor o menor medida, sienten algo “especial” cada vez que se encuentran con ropa de bebitos. Como las enternece! Y les arranca algún tipo de emoción que las lleva a los populares y coreados “ohhhhhhh…” de los Baby Shawer. A cuantas mujeres les he escuchado decir que les encanta la ropa de bebés. Debo admitir que por diversas razones las tiendas de ropa y productos para niños no me entusiasman demasiado; aunque haga mis esfuerzos, estar ahí me puede llevar al mal humor. Por momentos es como acompañar a una mujer a comprar ropa. Quizá debí también aprender a jugar con muñecas. Me gustaría saber si es que hay hombres que disfrutan en ir con sus esposas a ver ropa para la futura hija y juntos disfrutan escogiendo los diseños para el primer o cuarto mes, calculando si es mejor manga larga o corta según la estación y decidiendo entre tal y cual color. La maternidad es un hecho cultural y también biológico.

Al ver esa panza que durante estos ocho meses ha cobijado a un ser que de ser un par de células paso a transformarse en un cuerpito cercano a los 50 centímetros. Es fascinante. Y la manera como los senos se van alistando para dar de lactar nos recuerdan también nuestra condición de mamíferos. Por otro lado, el habernos mudado de casa hace tres meses por iniciativa de ella que buscaba un espacio para cuando naciera su hija-cría, me remite a la imagen de la búsqueda del nido.

Hay también en la maternidad un lazo transgeneracional.
Para el nacimiento de la pequeña esta viniendo desde Arequipa su bisabuela. La bisabuela quiere además enseñarle a su nieta a bañar a la recién nacida. Hay una pequeña cuna, un moisés que han traído desde Arequipa para que duerma y que posee toda una carga simbólica: ahí durmieron las seis hijas de la abuela de mi chica, es decir ahí durmió su madre y después también, le toco a ella dormir en ese moisés que ahora, varios años después le toca a su hija. Más de tres generaciones de mujeres se entrecruzan.



En algún momento hemos discutido sobre que tanto tendría yo entrar a tallar en decisiones como el color de una colchita y decisiones mayores como más adelante, el colegio. Más allá del número y el tipo de decisiones
lo que estaba en juego entre nosotros era hasta dónde tendría yo que implicarme e involucrarme. Hasta qué punto hay cosas que pertenecen a esa categoría “cosas de mujeres”. Entonces apelaba al argumento de esas diferencias por momentos tan irreconciliables entre maternidad y paternidad. La manera de sentir y vincularnos con nuestra paternidad a través de roles marcados por la sociedad, la cultura y la biología. Pero ya veremos que pasa, será todo un tema y cuántos motivos de peleas ocasionará.
Me imagino que tendré que descubrir qué es la paternidad.

El Hombre que nunca estuvo

Nina - Estrella: Tu padre aspira a descubrir la paternidad.
Me imagino que habrá un día en el que te contaré alguna historia acerca de la foto de este niño que es la foto de tu abuelo; una de las pocas fotos, de los pocos rastros que conservo de mi padre.
La paternidad también en transgenracional.